Como todos los años, esperándolo en silencio. Nadie repara en él. Como todos los años, ahí está, ahí continúa en silencio, esperándolo. A lo lejos se vislumbra la cuaresma y…los cultos... sus cultos. Si, como todos los años. Y recuerda tantas vivencias de Viernes Santo…Eran tardes tristes, de silencios ocultos, de devoción sentida. La espera se tornara en inminencia presentida. Ya está el Paso frente a él. Eleva su mirada hacia el Señor. Reza. Y se siente llevado por el rumor intenso, silencioso de tan portentosa imagen, en su cara hay una luz nueva, luz…que da escalofríos y esperanza. Es la profunda luz del Amor, que ilumina los primaverales cielos de la ciudad, de la ciudad real.
No hay comentarios:
Publicar un comentario